Mucho tiempo sin decir ni hacer nada de lo que tanto me gusta.
En verdad han sido unas muy largas vacaciones; descansadas, muy
bonitas y emotivas.
En estos momentos donde pronto unos aires de otoño anunciarán
su entrada, he estado muy cerca de dejarme llevar por la nada...
Esto significa que por un momento he barajado la idea de ausentarme
de todo esto, parecía que era lo correcto. Cuando todo apuntaba a
determinar mi decisión, he comprendido que es mejor "viajar" sólo
que mal acompañado.
Doy las gracias a mi marido, a mi hijo, a mi familia, a mis amigos y a
todos los que bien me quieren.
Al ritmo del sonido y de los matices que los días me regalan: sigo.
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