Volvemos a estar más cerca.
En unos días será mi cumpleaños y no paro de pensar qué podría darte... ¡Qué moraleja!
Como diría Aute: "Que terriblemente absurdo es estar vivo, sin el alma de tu cuerpo,
sin tu latido".
Hace poco leí una publicación de Carmen Posadas. Hacía referencia a la pérdida y muerte de
su marido. Entre otras muchas cosas, dice que el primer año es el más duro. Seguramente
así será, aunque me separa la perspectiva de esos veinte años con los que ella mira.
No me aferro a ti porque sigo enganchada a la vida, pero no puedo disimular si te digo,
que mi vida sigues siendo tú.